El compañero ideal

Los extremos nunca fueron buenos para una persona. No todo es blanco y negro.
Los distintos matices del gris intermedio son los que diferencian el camino de cada una de las personas que habitan este mundo.
El enamoramiento se basa en un principio en la atracción física. Evidentemente no nos podemos enamorar si no nos sentimos atraidos hacia la otra persona.
Por el contrario, el amor hacia otra persona se puede producir por muchos factores;

 

Rocío tenía una dificil descición.

Le gustaba estar con Federico, porque junto a él, ella era ella. En otras palabras, junto a él, Rocío se relajaba y disfrutaba de la vida.
No solo eso, sino que durante el tiempo en el que estuvieron juntos, ella realizó varios proyectos personales y mejoró considerablemente su calidad de vida.
La pasaba bien con Federico, pero había un problema y este era que no se sentía atraida por él e intentaba postergar lo más posible los encuentros intímos.
Su pareja, por el contrario, buscaba constantemente la forma de acceder al cuerpo de su pareja.

Por el otro lado, estaba Agustín y cada vez que ella lo miraba, su cabeza se nublaba y  su sexo se humedecía.
En cada encuentro que tenían, ella no podía contener las ganas de amarlo en la cama.
Agustín era atractivo por donde se lo mire y Rocío lo presumía ante todos.
Junto a él, ella experimentó placeres que nunca había vivido.
Pero había un problema y este era que después del sexo, cuando la adrenalina del momento se disipaba, aparecía el silencio.

Rocío intentaba romperlo, un poco nerviosa, contanto algún chiste o hablando de temas sin sentido. Ella sabía que se estaba comportando de manera infantíl, pero no lo podía evitar.
Rocio no podía continuar con su extenuante vida y sabía que había llegado el día en que debiera elegir entre ambos. Entre su amor y su enamorado.

– o –

Habían pasado un par de años desde que la conoció y Federico aún se comportaba de manera infantil al lado de ella. El estaba perdidamente enamorado de Rocío y sentía mucha atracción hacia su magnífico cuerpo. Por este motivo intentaba poseerla casi todas las noches, aunque muy pocas veces lo lograba.
Federico pasaba todo el día pensando en ella, desconcentrandose en su trabajo, distanciándose de sus amigos y de sus pasatiempos y sobre todo, de su vida.
Pasaba día, tarde y noche buscando la forma de sorprender a su pareja. La atracción que sentía hacia su cuerpo no se había desvanecido con el paso de los años y, por el contrario, ésta aumentaba cada vez más.

– o –

Agustín estaba enamorado de Rocío, o mejor dicho, de su cuerpo y sabía que ella le correspondía el sentimiento. Pero sentía que mas allá de la lascivia, no tenían temas en los que hablar, no tenían proyectos que compartir. Muchas veces sus únicas conversaciones eran los propios acontecimientos de la vida.
Él sentía que quería más y ya dudaba sobre ella.
Ella actuaba de forma infantíl y Agustín sentía que ella intentaba complacerlo de mil maneras distintas.
Estaba aburrido, sin embargo, la atracción que sentía por el cuerpo de su pareja era muy grande. En otras palabras, estaba enamorado de ella, pero no la amaba y debía decidir si sería suficiente para su futuro.

– o –

Entonces, ¿cúal es el verdadero sentimiento? y por sobre todo, ¿ha quién elegirias?

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